No hay color, me quedo con el ojo.
Hombre, quizás me he pasado un poco en entusiasmo en el sentido de que para fundar la Clinica Barraquer Mark II hace falta un poquito más de preparación, pero yo ya me quedaría contento si con ello os aproximáis a determinar cual es el problema que tiene en la vista nuestro californiano favorito.
Así empieza el ensayo oftalmológico:
La cámara versus el ojo humano
Superficialmente, el ojo humano parece ser similar a una cámara. Aquí parece ciertamente engañoso porque, además de unos pocos componentes compartidos, los dos difieren tanto en funcionamiento como en propósito. Considere primero la cámara. Una cámara graba una escena de una sola vez y en un instante. Lo que en realidad se graba es una proyección de la escena mediante una lente rectilínea o de ojo de pez sobre un sensor plano. Además, la cámara digital moderna y los algoritmos informáticos de posprocesamiento asociados están diseñados para:
Todo lo demás está aquí:
- Luminous Landscape: puerta delantera (no, no, no)
- Luminous Landscape: puerta de servicio (si, si, si)
