Dicen las lenguas de doble filo que los 8.123.042.884 habitantes del planeta Tierra le han pedido al Dios Google que en su infinita sabiduría haga un reloj en condiciones para que todos puedan lucirlo en sus muñecas. Yo no lo se porque no he podido preguntarle a todos, pero a los que he preguntado no tenían ni idea del asunto.
Aún así el Dios Google, haciendo uso de esa infinita sabiduría y no menos infinita bondad ha tenido a bien soltar sobre sus criaturitas este artilugio que es un dechado de perfecciones, como no podía ser de otra manera. Eso si,a 400 dólares cada uno, que Dios es Dios, pero no es tonto.
Google Pixel Watch 2: el gran paso adelante en relojes inteligentes que se pedía a Google
Nota tonta:
Yo le hubiera pedido otras cosas, pero vaya, bien está lo que bien acaba, porque esto acabará bien, ¿no?