La maleta, además de contener la tele, debe llevar algún tipo de polvitos mágicos de la botica de Albus Dumbledore o tal vez un hechizo saltarín tan potente como Expecto Patronus o Avada Kedavra, pues ha hecho expresar al becario probador el siguiente aserto: en pocos días hemos pasado de la sorpresa al enamoramiento total.
Ya estáis avisados. Id con cuidado al aporrear el enlace.