Pues eso, el esclavo más escribidor de Lens Rentals se ha estrujado las meninges para elaborar este ensayo poético dedicado a los trillones de personas que perderán su trabajo en los próximos segundos por la irrupción a los bestia de esa bestia incontrolada que responde al nombre de Inteligencia Artificial.
Por cierto, ¿habéis pensado los programadores de IA que cuando la IA aprenda a programarse a si misma pasaréis a engrosar la lista del paro que nunca se os pagará porque ya no habrá nadie en las oficinas?
Dice el bueno de Zach:
Mi consejo al competir con retratos de inteligencia artificial es ofrecer algo que la IA no puede: una experiencia humana llena de consejos, orientación y experiencia que su cliente pueda llevarse consigo fuera del estudio y de la sesión. La automatización llegará y eliminará miles de puestos de trabajo en los próximos años, pero al ofrecer servicios que van más allá de un simple producto tangible, podrá prolongar el valor de sus sesiones fotográficas.
Y todo lo demás está aquí:
Comparing AI-Generated Headshots with Real Headshots
I’ve talked a lot about AI on this blog over the years – from discussing how it will change the industry, to implementing AI-based tools to better your workflow. In short, I’m pretty terrified of what AI is going to do to budgets and jobs in general in both the photography and videography spaces.
Comparación de disparos a la cabeza generados por IA con disparos a la cabeza reales
He hablado mucho sobre la IA en este blog a lo largo de los años, desde discutir cómo cambiará la industria hasta implementar herramientas basadas en IA para mejorar su flujo de trabajo. En resumen, estoy bastante aterrorizado por lo que la IA le hará a los presupuestos y a los trabajos en general, tanto en el ámbito de la fotografía como en el de la videografía.
Ya hay proyectos para «resucitar» viejas glorias de la música.
Una IA puede emular a Rosalía, pero nunca sacaría un ‘Motomami». Es otro nivel, un salto quántico. (Aunque si saca un «Los Ángeles II», se lo compro).
Como un pintor, que, de pronto, cambia de estilo. La IA no puede hacer eso.