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Photographer : una serie documental de National Geographic dedicada a los fotógrafos. No, no, a mi no, he dicho a los fotógrafos.

Excelente película de un Clint Eastwood nikonista donde Meryl Streep estaba soberbia.

Ya hace mucho tiempo que yo he tomado conciencia de ser de los muy poquitos en muchas cosas. Soy muy poquito de ver series, cosa “anatémica” en nuestra plataformica sociedad. Para mi supone una esclavitud ver 6, 8, 10 o 12 peliculitas de una hora para que te expliquen una historia que con un largometraje de 2 horas o dos horas y media quedaría perfectamente explicada. Ya reconozco que soy pura anomalía en esto como en otras muchas cosas.

Bueno, pues esta serie de National Geographic igual era una de esas cuya excepción confirma la regla.

‘Photographer’ TV Series Celebrates Photographers More Than Photography

National Geographic’s new documentary series, Photographer, lives up to its name. The six, hour-long episodes focus less on beautiful photographs and more on their creation. The series is very much about the person behind the images: the photographer.

La serie de televisión ‘Photographer’ celebra a los fotógrafos más que a la fotografía

La nueva serie documental de National Geographic, Photographer, hace honor a su nombre. Los seis episodios de una hora de duración se centran menos en fotografías hermosas y más en su creación. La serie trata en gran medida sobre la persona detrás de las imágenes: el fotógrafo.

Google aviso a navegantes:

Photographer es una serie documental de seis capítulos que se emite ahora en Disney+, Hulu y National Geographic. Todos los episodios pueden verse ya en Disney+ y duran aproximadamente una hora cada uno. Los dos primeros episodios se han emitido en National Geographic, y los cuatro restantes se emitirán por parejas el 25 de marzo y el 1 de abril.

Yo solo tengo la plataforma Movistar Plus en su versión mínima, y aún así es el servicio por el que más pago al mes (agua, gas, luz, telefonía).

Imaginemos un mundo distópico mezcla de MadMax y BladeRunner en el que la cultura (por ejemplo los libros) estuvieran repartidos en diferentes librerías, pero para entrar a comprarlos debes ser previamente socio de esas librerías y pasar por caja. Si eres socio de la librería A y tu libro preferido está en la B, no podrás leerlo hasta que te asocies con ella.

Pues muy bien, ya vivimos en un mundo distópico, y es tan distópico que hasta las librerías están a borde de la ruina.

adolfo

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