
Un referente y lágrimas en la lluvia, ¿captáis?
Kessler, concretamente Galimany Kessler, era una pastelería del barrio de Sants en Barcelona que cerró hace pocos días después de 75 años de servicio. Era un referente de nuestro barrio, y una víctima más de las circunstancias actuales que acabará exterminando el comercio de proximidad.
Muchas tiendas han sucumbido en los últimos tiempos. Tiendas de toda la vida en que todos hemos comprado y ahora ya no están sustituidas por comercios de circunstancias que duran pocos meses. Si te paseas por el antiguo eje comercial Creu Coberta/Sants cada 6 meses lo más normal es que hayan aparecido tropecientas mil tiendas de futuro más que incierto.
Yo no digo ni que sea bueno, ni malo, lo que si digo es que es una pena, al menos para gente de mi edad.
Bueno, ¿y que tiene esto que ver con el “Síndrome Kessler”? Pues aparte de la coincidencia del nombre, nada de nada. Sin embargo es un síndrome muy divertido y nada improbable. Veremos que nos depara el futuro, ¿tal vez una “lluvia de estrellas nunca vista?
Oiga, la bomba de fisión, la de Oppenheimer, se basa más o menos en el mismo principio, pero con neutrones.
El pasado febrero un satélite ruso y estadounidense se cruzaron «rozándose». Estamos descubriendo las consecuencias ahora
Por alusiones: