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El bueno, omnipotente, modesto e inmensamente rico Ken Rockwell nos pregunta a todos: ¿sigues disparando con película?

Poco a poco se va desvaneciendo en el horizonte

Y yo, ni corto ni perezoso, pero pesaroso por saber que el domingo que viene les pagaremos  a un montón de mangantes unos sueldos y unas dietas de obispo con las que ellos se pondrán ciegos de “moules et frites” en un país bárbaro y en una ciudad donde hay una plaza muy grande y un reloj con figuritas, os voy a trasladar la misma pregunta.

Esto es lo que el bueno de Ken se contesta a si mismo:

¿Sigo disparando con películas?

Pregunta un lector, ya que parece que no hablo ni publico ninguna toma de película desde aproximadamente 2013.

¡Gran pregunta!

Desde entonces no he rodado películas. Disparé unos 120 en mi HASSELBLAD en 2016, pero nunca me molesté en hacer nada con él más que sacar una instantánea en respuesta, publicada por primera vez arriba.

Desde que las DSLR alcanzaron los 24 MP, he obtenido mejores resultados en formato digital.

Miré algunas imágenes digitales más antiguas de 2004 tomadas recientemente con mi Nikon D70 , y son tan horribles que recuerdan por qué me encantaba la película (obtuve mejores resultados en película hasta aproximadamente 2013), pero desde entonces la lente automática correcciones y optimización del rango dinámico y 24 MP se convirtieron en estándar en 2013 , hace tiempo que me gradué del cine.

Dicho esto, mi trabajo tiene que ver con el color . Para blanco y negro, todavía me encanta cómo se ve la película en formato digital, pero no pruebes esto en 35 mm, que es demasiado granulado para cualquier cosa que no sean efectos especiales de grano. Cíñete a 120 y 4×5 para películas para trabajos serios, a menos, por supuesto, que simplemente te guste el proceso o el aspecto particular que obtienes.

Lo dicho:

¿Sigues disparando con película?

Yo os confieso que no, y lo que peor me sabe es que coincido bastante con nuestro californiano favorito.

Dejé de disparar con película por allí el 2006, cuando después de un amago digital que se llamó Canon PowerShot S60 me compré mi primera DSLR digital que fue la EOS D400 de 10 tremendos Mpixels. Yo entonces no sabía lo que era un RAW y tenía por delante un mundo por aprender. Reconozco que la foto digital me abdujo, y hasta hoy.

Al igual que Ken, mis últimos carretes fueros unos rollos 120 de Ilford Delta 100 para mi Hassel que revelé con todo cariño oliendo a vinagre en el lavabo de casa. Un poco de nostalgia si que me da, pero se me pasa enseguida cuando abro el armario y veo allí todos los componentes del laboratorio químico.

adolfo

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