Se capta la idea, ¿no?
Premisas indispensables para que todo cuadre:
1.- Mañana es San Juan y esta noche es la verbena del solsticio de verano. En algunas de las Españas es tradición celebrarla en las playas, aparte de con una sardinada y una coca de fruta y piñones, con una hoguera cuanto más grande donde simbólicamente se queman los malos ratos y recuerdos del año anterior.
2.- Dado el panorama político español parece evidente que los Sanchistas, afines y seguidores están hechos de materia, sin embargo los Feijoistas, afines y seguidores están hecho de antimateria. Lo mismo me vale si es al revés, yo ahí no me meto.
Tesis:
¿Qué os parecería si esta noche quemáramos en la hoguera a todos nuestros políticos. El fuego se encargaría de reducir a esas malévolas criaturas a sus partículas elementales, y estas al mezclarse, se aniquilarían entre si produciendo cantidades ingentes de energía que se almacenaría oportunamente en las batería de millones de coches Tesla formados para revista al lado de las hogueras.
Conclusión:
No sería energía infinita pero, dado el ingente número de maquiavélicas criaturas, habría por lo menos hasta que los reactores de fusión estuvieran a punto.
Corolario:
Puede que me haya tomado alguna licencia poética en el flujo científico del asunto, pero oiga, con probarlo no perdemos nada, bueno, solo a unos cuantos políticos con lo cual el tema es claramente un win-win.
Lo tenemos claro, ¿no? pues venga, a por ellos.
Nuestros amados líderes no son más que una pequeña representación estadística de todos nosotros.
¿Que no tienen vergüenza? ¿Que roban?
No se en vuestro pueblo o ciudad, pero en el mío, si te colocan junto al cajón de los dineros y no le das pellizcos golosos al montón, TE LLAMAN TONTO.
Es nuestra idiosincrasia. Es lo que hay.
Adolfo, eres pura poesía.
Un saludo.