Oh my God, de Canon no me creo nada.
El audaz, intrépido, osado y temerario Chris Nicolls se ha atrevido a probar una cámara que aún no existe: la Canon EOS R1.
Nota del editor:
Queda terminantemente prohibido pensar, opinar, argumentar, o divulgar que la R1 es la R3 cambiada de nombre. Que no me entere yo que vais por ahí difundiendo infamias.
¿Como acaba su artículo analítico el bueno de Chris?, pues así:
¿Deberías comprarlo?
Tal vez. Si te gusta un tipo de fotografía exigente y selectiva, la EOS R1 es ideal. De lo contrario, la EOS R5 MarK II podría ser la mejor compra.
Y que cada cual entienda lo que quiera.
Canonistas inquietos, entregados a la causa, palmeros incondicionales, personas de buena voluntad (políticos abstenerse), razón aquí:
Canon EOS R1 Review: A Flagship Made For a Select Few
My first experience with the Canon EOS R1 was in the sweltering heat of Phoenix, Arizona with a pre-production unit. There is of course, only so much that you can test with a pre-production unit under predefined conditions.
Revisión de Canon EOS R1: un buque insignia hecho para unos pocos elegidos
Mi primera experiencia con la Canon EOS R1 fue en el calor sofocante de Phoenix, Arizona, con una unidad de preproducción. Por supuesto, hay muchas cosas que se pueden probar con una unidad de preproducción en condiciones predefinidas.
18 minutos luz dura la peliculita, ostras, la de cosas que se pueden decir en 18 minutos.
