Mi querida Madre del Amor Hermoso me proteja y me impida hacer cualquier comentario. Lo único que se puede decir son dos cosas:
- Yo no la hubiera hecho igual, empezando por los vestidos y acabando por el escenario churrigueresco.
- Pero mi “caché” tampoco es el mismo, así que el que esté libre de pecado que tire la primera ojiva nuclear.
Leibovitz, las fotos reales y las líneas torcidas: los detalles de unos retratos de 137.000 euros
No os cortéis ni un pelo.
¿Figuras pequeñas y estancias grandes?
¿Hubiera pasado algo si se enderezan los techos?
Estaría autorizado a comentar si fuese capaz de hacer algo parecido.
Pero no. Ni usando IA en garrafas.
Abrir la boca solo puede confirmar mi ignorancia.
Por iluminación y disposición, si alguien la ve en 500 años pensará que ella es la Reina y él su comsorte.
Y quizá esa es la historia que cuenta la foto.
Me sorprende que hay pocos comentarios de porqué la foto, aun pareciendo la misma toma, la han separado en dos.
Yo tengo una teoría, que es que, entre todos los disparos no había una buena en la que saliesen los dos bien.
Solución, usar la toma mejor de cada uno, aunque fuesen de distintos disparos.
Ya se que se podía haber echo el esfuerzo de juntar las dos fotos, pero el riesgo de ser descubierto el truco, hubiese sido demoledor, así que mejor hacerse los modernos y separar la foto.
😉
(copio y pego lo que he comentado en otro sitio)
FOTOS REGIAS
De las muy recientes fotografías de retrato hechas por la fotógrafa estadounidense Annie Leibovitz a los Reyes de España, puede obtenerse alguna información interesante:
◾ Aunque han sido presentadas como retratos independientes, de la perfecta coincidencia de líneas rectas entre una y otra puede deducirse que en realidad provienen de fotografías hechas con la cámara en la misma localización y orientación. Es decir Leibovitz plantó la cámara en un trípode y la dejó fija durante las sesiones de fotos hechas tanto al Rey como a la Reina, seguramente por separado para no cansarles. Por este motivo solo hay que juntarlas para tener una panorámica correctamente montada sin errores de paralaje.
◾ Lo anterior significa que las imágenes finales dedicadas a cada personalidad son recortes parciales verticales aplicados sobre los lados de tomas horizontales de mayor tamaño. Esto quiere decir que en lo que al aprovechamiento de la resolución de su cámara se refiere, Leibovitz se marcó un 2×1 entregando fotografías con la mitad de Mpx de la resolución de partida (con seguridad suficiente para permitirse el recorte).
◾ La escena presenta fugas en motivos rectilíneos paralelos que, aplicando un sencillo truco geométrico (https://lnkd.in/dM_dFnBp), permiten estimar la altura a la que estaba colocada la cámara cuando se hicieron las fotos. La línea amarilla (https://media.licdn.com/dms/image/v2/D4D22AQE2ZovbEjEVaA/feedshare-shrink_2048_1536/feedshare-shrink_2048_1536/0/1732667773360?e=1735776000&v=beta&t=37Tvx_HJ7axjJEOdgappdLLK-37Itnp1UypmUpJNNgM) indicaría este horizonte artificial, y viéndola directamente podemos afirmar que Letizia se marcó un Tom Cruise subiéndose en alguna cosa que la hiciera ganar altura ya que su cintura prácticamente coincide en altura con la del Rey, y va a ser que no.
◾Una buena cantidad de detalles técnicos podrían hacer considerar las imágenes deficientes a ojos de un aficionado (cámara ligeramente desnivelada hacia la izquierda, líneas verticales con fugas rozando el exceso, balance de blancos inconsistente izquierda/derecha, altas luces demasiado quemadas en la ventana, procesado un tanto artificial y diferente para cada uno de los personajes, los pies del Rey a punto de salirse del encuadre). Con el renombre de la autora, el precio que se ha pagado por las imágenes y el prestigio que hay en juego, mi apuesta es que todo es consentido o incluso calculado, no fruto de ningún descuido o de la dejadez.